Red de puntos para coches eléctricos
En países como España la red de puntos para coches eléctricos es insuficiente, y aunque solo haya 21.400 unidades de estos coches circulando, la preferencia hacia ellos es cada vez mayor. Las ventas en este país han crecido en un 49,4% en el último año, según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles, Turismos y Camiones (ANFAC).
Los usuarios que han comprado este tipo de vehículos, han llegado a quejarse y reclaman que aumenten la red de puntos para coches eléctricos. Ya que no es justo que en otros países como el Reino Unido cuenten con 2.300 puntos de recarga y en Francia con 800. Solo en España existen 260 puntos repartidos por sus principales ciudades, teniendo la mayoría instalados en su capital.
La sugerencia ante el problema
Para que exista una adecuada red de puntos para coches eléctricos en todo el país, está sugiriéndose un punto de recarga por cada 50 kilómetros. Esto aliviaría la preocupación de muchos propietarios al momento de viajar de una ciudad a otra con un auto de batería.
Según las declaraciones del delegado de la Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos, Salvador Ejarque. “La ampliación de redes de carga no deben darse dentro de la ciudad, sino más bien en las carreteras interurbanas”. También explica que en las ciudades los autos eléctricos con tan solo una recarga durante la noche es más que suficiente para que funcionen durante el día, ya que recorrerán distancias cortas.
Poniéndose en acción
La Generalitat de Cataluña es una de las primeras administraciones que han querido resolver el problema de la escasez de puntos de recarga. Por lo cual, desde hace un año tomó la iniciativa y aprobó un presupuesto de 5,8 millones de euros para que fueran instalados en un período de 3 años, 81 puestos de carga rápida.
Pero para fomentar el uso de la red de puntos para coches eléctricos, Cataluña ofrece el servicio completamente gratis. Es decir, que cuando el usuario vaya a recargar su coche no tendrá que pagar por la energía utilizada. Esto puede calificarse como un avance positivo, porque hará que las personas quieran cambiarse al modelo eléctrico dejando atrás el de combustible fósil.
Otro caso en relación a esto, ocurre en la comunidad de Baleares, donde han invertido más de 1,5 millones de euros en la creación de 250 puntos de carga semirrápida. Esto con el propósito de compatibilizar el auge del turismo de que ofrece la zona con la preservación del medioambiente.
Pero no todo es color de rosa, porque todavía existe una gran deficiencia de instalaciones de carga en otras zonas, como por ejemplo hacía el oeste de la península ibérica. Fernando Piña delegado de AUVE en Madrid señala que si no eres dueño de un Tesla cuya autonomía sobrepasa los 400 kilómetros, los viajes para ti y tu familia serán una odisea. Tendrán que planear cada parada con detalle para así evitar quedarse sin batería.
Problema latente
Existe otro detalle muy preocupante en torno a la instalación de dichos puntos de recarga y es en cuanto al poco animo de invertir por parte del sector privado. Ya que en España el alto coste de la energía conlleva a un gasto anual de 4.000 euros por cada punto de recarga funcionando, haciendo que para estas empresas haya más perdida que ganancia.
Sin embargo dentro de este mercado, han surgido otros actores que muestran soluciones aparentemente sustentables. El pasado mes de junio fue inaugurada en Segovia una electrolinera que funciona a partir de paneles fotovoltaicos, los cuales tienen la capacidad de cargar en una hora más de 6 vehículos eléctricos.
Si esta iniciativa y otras llegan a tomarse en cuenta por parte de los organismos competentes, veremos que en pocos años el crecimiento de los vehículos eléctricos superará a los de combustión. Logrando erradicar considerablemente la contaminación que estos últimos producen.